¿TRANSPARENCIA?

Querido ex – compañero (a)
Soy Jorge Ulloa Quezada, ex – alumno del Liceo Las Américas, promoción de 1986.
Al igual que ustedes, durante muchos años tuve la legítima aspiración de concretar una reunión con mis ex – compañeros y, junto con ello, formar una organización social, acrisolada bajo el sueño de ser un aporte sustancial, humano, solidario y desinteresado en pro del apoyo de los alumnos de nuestro querido liceo.
El 11 de enero de 2009, ese sueño se concretó, gracias al impulso y el interés “MÍO” y del actual presidente del centro Sr. Rosamel Miranda Salazar, quien no titubeó en “recurrir a mí”, para la materialización de éste anhelo de muchos, pero que nadie, hasta ese momento se había atrevido a poner en práctica.
El desafío estaba planteado y, como tal, no estuvo exento de sacrificios, pero fueron asumidos gustosamente, con tal de volver a ver a muchos de ustedes, saber en que pie estaban en sus vidas y, lo que era más importante, comenzar a construir las bases, para conformar la institución social, sin fines de lucro, de la cual hoy muchos formamos parte.
La idea de elegir directiva y encaminar decididamente el centro fue aceptada, cuando la planteé en ese primer almuerzo de camaradería en “La Valenciana”, como muchos de ustedes recordarán y, en donde se eligió democráticamente al 90% de los actuales miembros de ésta.
Lamentablemente, no todo puede ser perfecto en la vida y pese a haber tenido el honor de ser elegido vicepresidente, gracias al voto de muchos de ustedes, tuve la desdicha de comenzar a asumir los desastrosos costos materiales y humanos al enfrentar una enfermedad catastrófica que, en estos momentos me tiene desahuciado, cual es : EL CÁNCER.
Aún así, siempre puse mi mejor empeño en aportar al centro, mediante correos electrónicos, cartas y protocolo a las autoridades, redacción de nuestro actual estatuto, preparación de presentaciones en Powerpoint, confección de afiches y bases de datos, etc. Pues era lo único que podía hacer, al no contar con las fuerzas y la capacidad física necesarias, ya que fui operado en cuatro oportunidades y casi me mataron “de golpe” con las veinticuatro sesiones de quimioterapia que tuve que afrontar.
Podrán imaginar el orgullo y la inyección de ánimo que significó para mí, el ser ratificado en mi cargo de vicepresidente, cuando por mi manifiesta incapacidad física, traté de renunciar en la asamblea de octubre de 2009.
Eso me motivó a trabajar con mayor ahínco y compromiso para que durante el año 2010 se concretara el sueño de obtener la personalidad jurídica para el centro. Para éste desafío, se me designó la misión de redactar el estatuto del centro, escrito que redacté con el máximo de profesionalismo y dedicación con tal que fuese aprobado en la asamblea de Octubre de 2010, como muchos de ustedes recordarán.
Lamentablemente, mi trabajo no fue reconocido y fui ofendido “gratuitamente” por algunas personas de la directiva, cuando comencé a exigir mayor transparencia, orden y claridad en la marcha del centro, hecho que, finalmente, me llevó a “renunciar ante la directiva a mi cargo de vicepresidente”, situación que comuniqué a una gran mayoría de ustedes, por no compartir el tipo de conducción “personalista” y carente de trabajo en equipo que había adquirido la gestión de nuestro presidente, actitud que cuestioné y sigo cuestionando pues se contraviene con la seriedad, difusión y “real compromiso social” esenciales para una conducción creíble, eficiente y sustentable de nuestra institución.
Muchos de ustedes concurren a éste “encuentro”, a ésta “junta”, con un afán lúdico o de esparcimiento e interacción social, sin preguntarse o cuestionarse, especialmente si han firmado la carta compromiso, independiente si han pagado o no sus cuotas, acerca de “la marcha del centro de ex – alumnos”, su “estado de cuentas”, “los objetivos estratégicos a corto, mediano y largo plazo”, etc.
Por mi parte yo les hago la siguiente pregunta:
¿Se han preguntado el real interés de nuestro presidente y mucha de nuestra directiva al crear el centro de ex – alumnos?
R: el interés estaba motivado por el hecho de poder beneficiarse de éste, al participar activamente en el curso de administración que dicta el instituto Iprosec en las aulas del liceo, beneficiando al presidente, tesorera, secretaria, etc. (sin considerar a “ciertos profesores” del liceo que también se benefician).
Es decir, la Génesis del centro de ex – alumnos estuvo siempre viciada y yo sólo fui el tonto útil de turno, hasta que comencé a exigir orden y transparencia, allí fui “eliminado” (que conveniente para ellos que yo haya enfermado de cáncer… pero que lástima que no morí de inmediato, pues aquí estoy denunciándoles)
¿Dónde quedó el interés de servicio social? ¿Existía realmente un legítimo interés de servicio a la comunidad escolar, o fue sólo el pretexto?
No se engañen compañeros, abran los ojos y crean lo que les digo…
RAZONES PARA EL DESCONTENTO
1. Poca transparencia de parte del presidente de ésta “institución social sin fines de lucro” (faltó añadir “ni beneficio personal”, al estatuto. –“que pena no haberme dado cuenta antes y haberlo incluido dentro de los artículos de éste”) al no reconocer, desde un principio, que tenía intereses creados, antes de la formación de éste, pues siempre estuvo dentro de sus planes el “sacar provecho del centro”.
Si no me creen vean quienes forman parte del curso de administración que dicta el liceo.
No sé ustedes, pero a mi me enseñaron desde pequeño a “no sacar ventaja, ni beneficio personal de las instituciones a las cuales pertenezco”.

2. Indiferencia, descrédito, difamación, ofensa de parte del presidente, como de gran parte de la directiva (por no decir toda) al no comunicar o informar en forma oportuna de los acuerdos, gestiones, planes, estadísticas, etc. que tenían directa relación con la marcha del centro al Vicepresidente en ejercicio (o sea yo), aún cuando esto lo solicité en innumerables ocasiones, por correo electrónico, Por ejemplo: hasta el día de hoy espero un pronunciamiento formal de lo sucedido en la última asamblea en donde se aprobó el estatuto (que yo mismo redacté) (adjuntar).

3. Desorden administrativo, estadístico y de procedimientos para una marcha seria y beneficiosa del centro. Lo que se ha logrado hasta ahora ha sido, gracias a mí y el concurso entusiasta de muchas otras personas, pero siempre con muy poca planificación y mucha improvisación.
Ojalá la tesorería del centro tenga las cuentas claras para esta rendición de cuentas, pero les informo que el año 2010 ya habían muchas cuotas canceladas, más los 70 mil que aportó un socio para las bandas y coronas de las reinas en la semana aniversario del liceo:

4. Falta de liderazgo en la toma de decisiones y desapego a los principios rectores del centro y que faltan al artículo 1º de nuestro estatuto, cuando en una actitud incomprensible dejan fuera de la ayuda social que se había planificado entregar, al hijo del concejal Pedro Toledo Cui Cui, el alumno Diego Toledo Chacón, por una falta administrativa cometida supuestamente por éste dentro del Liceo.
El Artículo 1º al que se hace mención dice, entre otras cosas: “…sin distinción alguna…” y aquí lo primero que se hace es discriminar a un alumno del liceo, subordinándose a las sanciones disciplinarias que impuso la dirección de éste… No es mi ánimo enjuiciar la sanción administrativa que impuso el establecimiento, aún cuando, desde mi propia experiencia personal con la enfermedad que aqueja al alumno, no la comparto, por ningún motivo, pues la considero inmoral y subjetiva.
¿Por qué lo hicieron? ¿Será porque tanto la directiva del centro, como la dirección del liceo se están beneficiando mutuamente?
En éste punto me voy a extender pues es un tema que me toca muy de cerca, por toda la angustia, dolor físico, mental y emocional que conlleva el convivir diariamente con el Cáncer, como es el caso que le toca vivir a éste alumno o ex – alumno del liceo Las Américas, Diego Toledo Chacón. De verdad les digo que, deberían dar gracias a Dios que ese niño antes no mató a alguien con todo lo que le ha tocado vivir con el cáncer: Cirugías invasivas e invalidantes, quimioterapias, etc… sería largo de explicar, pero para una persona como yo, “que lo padece personalmente”, lo entiende perfectamente y, ante las burlas y el bulling al que fue sometido, era lo menos que podía esperarse, la reacción que tuvo de amedrentar a quienes, en forma cruel e indolente se burlaban de él.
5.- las ofensas y el descrédito al que he sido sometido por todos o casi todos los miembros de la directiva; palabras como:
- “esto es algo personal” (cuando presenté mi carta de renuncia –indignado con tanta mala educación)
- “Jorge no es parte del centro, pues no ha firmado la Carta compromiso”, esto ya lo encuentro de lo más soez e inmoral, casi al borde de la inmundicia, pues, por si no lo saben, las cartas compromiso… las redacté yo también y, con toda seguridad la directiva “extravió” mi carta compromiso y, aunque no la hubiese firmado, soy socio, desde el momento que me gradué del mismo liceo de quienes me ofenden y comencé a pagar mis cuotas. (Que hablar de que soy cofundador de ésta institución)
- El irreproducible comentario dejado en el muro de facebook, del presidente del centro, Sr. Rosamel Miranda, por la Sra. Julia Valenzuela en marzo de éste año, en donde lo menos que me dijo es que yo “no tenía estatura moral”… ¿sabrá la Sra. Valenzuela lo que esas palabras significan?… lo dudo.
6.- falta de conocimientos y de compromiso serio, pues no se entiende el afán tan grande de obtener personalidad jurídica, si hasta el día de hoy no se ha postulado a ningún proyecto con ésta.